Después de más de dos años de pruebas diarias y reuniones periódicas con los operadores e inversores de Wall Street, los especialistas en mercados de la Reserva Federal aún no están seguros de cuán ordenadamente podrán subir las tasas de interés tras siete años en niveles cercanos a cero.

Se espera que el banco central de Estados Unidos suba las tasas en un cuarto de punto porcentual el miércoles, pero sólo a la mañana siguiente su equipo de mercados sabrá cuán eficaces son las herramientas nuevas y poco probadas de la Fed para sacar del piso los tipos de interés.

El peor escenario para la Fed sería si las tasas de interés del mercado no se mueven o suben mucho menos que lo deseado, aunque tanto la Fed como los mercados esperan que las herramientas funcionen. La tarea será mucho más difícil que antes de la crisis del 2008, cuando la Fed se aseguró que las tasas de interés alcanzaran su meta al negociar valores con 22 operadores primarios, lo que le permitió controlar la liquidez del mercado de dinero. Ahora, tras años de estímulo monetario y costos de endeudamiento cero, los bancos están inundados con US$ 2,6 billones en reservas adicionales, así que la Fed sólo puede llevar las tasas del mercado hacia su objetivo incrementado tratando de absorber el exceso de dinero.

Mercados Financieros