Luego de haberse desplomado un 2,02% en las dos sesiones previas, la cotización del dólar estadounidense tuvo un leve ascenso de 0,15% ayer, con un mercado que mostró una mayor disposición compradora.

Las compraventas interbancarias de la víspera se efectuaron a $ 30,664 en promedio, con lo que redujo levemente la caída acumulada en junio a 0,3% y aumentó el avance del año hasta el 2,65%.

El Banco República (BROU), por su parte, incrementó 15 centésimos la punta compradora de la pizarra a $ 30,15 y cinco centésimos la punta vendedora a $ 31,25.

A través de las pantallas de la Bolsa Electrónica de Valores (Bevsa) se operaron US$ 21,9 millones.

Según explicaron a El País los operadores cambiarios consultados, la leve presión compradora se debió, más que nada, a que algunos agentes aprovecharon los bajos niveles alcanzados por el tipo de cambio para comprar, con el objetivo de venderlos en niveles más altos, con lo que obtienen una ganancia por este concepto.

Este avance del dólar se dio a pesar de que aún persisten problemas de liquidez en algunas instituciones del mercado.

TIPO DE CAMBIO