El Índice Líder de la actividad de la Industria de la Construcción (ILIC) "mejoró respecto a la última estimación, puesto que predominaron los impactos favorables de algunos de los determinantes.
Si bien los determinantes internos evolucionaron de manera predominantemente negativa, las señales positivas más claras provinieron de la región", indicó el Centro de Estudios Económicos de la Industria de la Construcción (Ceeic).
En ese escenario, "se proyecta una caída tendencial en el entorno del 2,3% para 2017, una mejora no menor con respecto a la edición anterior. Sin embargo, las perspectivas negativas se prolongan hacia 2018", explicó.
"Desde la actualización anterior se observó una dinámica más alcista que la esperada para los costos de construcción, al tiempo que la producción de cemento cayó. Ambos movimientos impactaron negativamente en el indicador. Lo contra-rio ocurrió con la tasa de desempleo, que, si bien aumentó, lo hizo por debajo de lo esperado previamente", señaló el Ceeic. "La inflación en dólares, por su parte, fue levemente mayor a la esperada, una dinámica favorable" a la actividad", añadió.
"Yendo al escenario regional, cuyas señales son recogidas en el ISAC argentino, las perspectivas mejoraron de manera significativa a partir de un incremento en el indicador del país vecino en el mes de marzo", dijo.
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