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En acto del Pit tildan de "fascista" a Sherwin

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En el acto de ayer del Pit-Cnt por el paro, el presidente del Sindicato de Trabajadores de la Industria Química (STIQ), Raúl Barreto, informó que se encuentran en conflicto tras el anuncio de la empresa Sherwin-Williams del cierre de su fábrica de pinturas en Uruguay, en el momento en que sus gerentes se encontraban participando de una instancia de negociación con los trabajadores en el Ministerio de Trabajo.

"Los compañeros fueron desalojados por personas de una empresa de seguridad en plena negociación", recordó. El dirigente del STIQ afirmó que "las leyes se deben respetar y por eso le pedimos al gobierno que las haga cumplir. Porque hoy hay 70 familias que se quedan en la calle y por eso los trabajadores vamos a luchar". Finalmente llamó a rodear el conflicto que provocó la empresa Sherwin-Williams.

Por su parte, el dirigente sindical Diego Rondine acusó de "fascista" a la empresa que comunicó los despidos por mensajes de texto.

Ayer, hubo una nueva instancia en el Ministerio de Trabajo entre el sindicato y representantes de la empresa y acordaron pasar a un cuarto intermedio hasta el lunes. Lo que está sobre la mesa es si la firma acepta postergar los despidos hasta el 15 de septiembre (cuando cerrará definitivamente) y hasta esa fecha envía a los trabajadores al seguro de desempleo. El dirigente sindical Julio Bocca dijo a El País que la empresa también pide que se levanten las medidas de cerrarle las puertas a la fábrica (un grupo de trabajadores acampa allí) si necesitan retirar productos.

Entrevistado en el programa Claves Económicas del canal de cable NSTV, el ministro de Trabajo Ernesto Murro había dicho que no sabe "por qué cierra Sherwin-Williams. Lamentablemente es un muy mal ejemplo de cierre de empresa, sin aviso, sin negociación".

Es que según asegura el sindicato, hasta el viernes pasado (cuando se anunció el cierre) la compañía había negado que bajar la cortina fuera una de las opciones sobre la mesa. Ahora pasará a producir en otras plantas de la región. Murro afirmó que "es un caso típico de una actitud empresarial de abuso de poder de una empresa que cierra" cuando ha habido otros ejemplos de cierres ordenados.

CIERRE DE FÁBRICA

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