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BID explica cómo Uruguay logró la mayor clase media

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Consumo, motor apagado. Foto: Nicolás Pereyra
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NICOLAS PEREYRA

El 62% de la población uruguaya está en la clase media según informe.

Uruguay tiene el mayor porcentaje de su población en la clase media en América Latina y el Caribe y eso en buena medida se debe a la mayor proporción de empleos formales, según un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

El informe "Pulso Social 2016: Realidades y Perspectivas" del organismo —divulgado ayer— señaló que "durante la última década la clase media de América Latina y el Caribe casi se duplicó y alcanzó a 186 millones de personas".

El estudio indicó que "los individuos con ingresos per cápita en el rango (denominado) vulnerables —no son pobres, pero tampoco clase media— constituyen el grupo más importante, ya que es dominante en 10 países" de la región.

A su vez, "la clase media es la mayoría en cinco países, y los pobres constituyen la mayoría en sólo tres países", agregó el BID.

"Los países menos pobres, como Argentina, Chile y Uruguay, son aquellos en los que la clase media es la más grande (53%, 49% y 62%, respectivamente)", expresó el documento. Uruguay lidera en la región con la clase media más extendida (ver gráfico).

En tanto, "los países con mayor incidencia de la pobreza, tales como Guatemala, Honduras y Nicaragua , tienen una clase media más pequeña (16%, 14% y 11% respectivamente)", añadió.

A su vez, Uruguay es el de menor pobreza en la región. El BID define a pobres como aquellos cuyo ingreso en el hogar per cápita es menor a US$ 5 por día. Los "vulnerables" son aquellos con un ingreso en el hogar per cápita diario de entre US$ 4 y US$ 12,40. La clase media la componen aquellos con ingresos en el hogar per cápita entre US$ 12,40 y US$ 62 por día. Los ricos, son los que tienen ingresos en el hogar per cápita que superan los US$ 62.

¿Cómo se dio este crecimiento de la clase media? En el promedio de América Latina y el Caribe, el mayor crecimiento de la clase media se dio en el período 2002-2008. En cambio, en Uruguay, se dio en el período 2008-2014 (ver gráfico), si bien es uno de los países que el informe identificó que experimentaron "progresos significativos en los 12 años" (junto a Brasil, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Panamá, Paraguay y Perú).

El organismo añadió que la movilidad entre clases se dio "de manera ordenada" con los pobres entrando al grupo de "vulnerables" y este segmento pasando a la clase media.

Según el BID, "uno de los factores clave para engrosar las filas de la clase media es el empleo formal, ya que permite el acceso a la seguridad social".

El documento, agregó que "el empleo formal es la característica más distintiva de la clase media. (En la región en promedio) casi dos tercios de los trabajadores en este grupo están afiliados a la seguridad social, 50% más que entre los vulnerables y cuatro veces más que entre los pobres. Sin embargo, esta característica es heterogénea".

Eso es porque "en Bolivia, Paraguay y Perú, sólo el 40% de los trabajadores de clase media tienen empleos formales, pero en Costa Rica y Uruguay los trabajadores formales (en la clase media) superan el 80%", expresó el organismo.

Otro aspecto relevante es "la reducción de la desigualdad" porque "tiene una estrecha relación con la reducción de la pobreza", afirmó. "Si la desigualdad sigue siendo la misma, la pobreza disminuye a través del aumento de los ingresos, pero si cae la desigualdad, la reducción de la pobreza es mayor, ya que amplifica el impacto de un aumento de los ingresos", explicó el estudio.

"Una simulación sencilla ilustra esta relación. Brasil, Chile, Costa Rica y México tienen coeficientes de Gini de aproximadamente 0,52. Si estos países tuvieran el Gini de Uruguay (0,42) —el menos desigual de la región—, y los ingresos se mantienen sin cambios, la pobreza se reduciría en un 47% (Brasil), 18% (Chile), 46% (Costa Rica) y 29% (México). El índice de Gini mide la distribución de ingreso y varía entre 0 y 1, siendo 0 el reparto perfectamente equitativo de los ingresos y 1 la concentración absoluta de los ingresos en manos de una persona.

"Aunque los beneficios del crecimiento económico desde principios de los años 2000 han contribuido a la expansión de la clase media, éstos no han sido aprovechados de manera homogénea por todos los países y grupos etarios. Como consecuencia, la región continúa siendo la más desigual el mundo", aseguró.

De hecho, el BID señaló que 11 de los 20 países con mayor desigualdad entre 136 evaluados en el mundo, están en la región y esto impacta en especial en la niñez.

"Los niños se han beneficiado menos de los programas y transferencias para el combate a la pobreza extrema y de ahí la importancia de poner especial atención a la infancia ahora, ya que es precisamente en esa etapa de la vida donde comienza la desigualdad", dijo Marcos Robles, economista del Sector Social del BID y coautor del informe. La pobreza extrema que afecta hoy a los niños es tres veces mayor que la pobreza extrema entre los adultos mayores. Esto representa un retroceso ya que hace 20 años, en 1996, la pobreza extrema de los niños era el doble en comparación con la de los adultos mayores, explicó el organismo.


Si no puede ver la gráfica haga clickaquí

Inclusión Social: líder en región

Uruguay es el país de Latinoamérica con mejor índice de inclusión social, seguido de Brasil y Chile, mientras que Guatemala, Honduras y Nicaragua son los peores, según un informe. El "Índice de Inclusión Social", que elabora anualmente el Consejo de las Américas en colaboración con el Departamento de Estado de EE.UU., ubica a Uruguay como líder por tercer año consecutivo. Este indicador, pone nota a 15 naciones en función de 23 variables. Uruguay obtiene una puntuación de 86,80 sobre 100, porque, según el informe, "simplemente hace un mejor trabajo que sus vecinos en proteger a sus civiles sin importar su género, orientación sexual o raza". Una de las claves, es que el país destina 10,47% del PIB a programas sociales, afirma.

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Consumo, motor apagado. Foto: Nicolás Pereyra

ESTUDIO DEL BANCO INTERAMERICANO DE DESARROLLO

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