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Clave para evitar perder US$ 800 millones al año

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La empresa Zambrano & Cía buscó aportar información a productores. Foto: A. Colmegna
Conferencia Creando futuro con los pies en la tierra, organizada por Zambrano y Cia. en sus oficinas, Mvdeo., ND 20160829, foto Ariel Colmegna
Archivo El Pais

Lo deja de percibir la ganadería por no mantener preñez.

La pérdida de 10,3% anual de promedio entre el tacto de la vaca preñada y el ternero destetado, representan una pérdida de 300.000 terneros y tomando un precio de US$ 1,80 por kilo (pensando en animales de entre 300 y 350 kilos), proyectan una pérdida de alrededor de US$ 800 millones anuales para la ganadería uruguaya.

Más allá de cuantificar esas pérdidas, el doctor Rafael Díaz, principal de Procreos SRL e integrante del Servicio de Mejora de la Gestión en la empresa Zambrano & Cía, mostró ejemplos concretos de medidas que no se aplican para mantener estable la tasa de preñez. Hay ejemplos claros de predios que han logrado bajar esa diferencia a 5%, aumentando sus ingresos y generando más divisas para el Uruguay ganadero.

En el marco de la charla:"Creando futuro con los pies en la tierra", desarrollada por Zambrano & Cía. buscando aportarle a los productores mayor información para que mejoren la toma de decisiones, al especialista le tocó mostrar su experiencia en los mejoramientos reproductivos económicamente viables. Díaz mostró el camino para lograr más terneros, pero es claro que mejorar la tasa de procreos cada año, más allá de las ayudas del clima, demandan mayor inversión del sector productor.

"Uruguay precisa mantener una tasa de procreos estable", afirmó Díaz, en el marco de un partido que se juega durante tres meses. Uruguay tiene un rodeo de cría sólido, porque son 4,2 millones de vacas de cría, pero aún hay mucho por crecer. También es cierto que esa diferencia de 10,3% entre el tacto de la vaca y el destete no es culpa de los veterinarios, que bien pueden errar, en algunos casos, su diagnóstico. Ahí hay metidos abortos por enfermedades reproductivas silenciosas, poco control de los toros y hasta períodos de deficiencias en la alimentación de las vacas que después se pretende que queden preñadas.

Díaz recordó que hay datos de productores uruguayos que bajaron a 5% esa diferencia citada anteriormente, donde se perderían sólo 150.000 terneros al año y representarían una caída de US$ 400 millones. El productor criador vive, entre otras cosas, de la venta de terneros y con resultados de preñez magros, hay años en los que no puede vender y su capacidad de inversión disminuye.

Freno.

Las vacas "solteras" y las vaquillonas que van rumbo a su primer parto no tienen dificultades para preñarse. El cuello de botella para mejorar los resultados reproductivos está a nivel de vacas con cría al pie y las vaquillonas de segundo entore.

"Se pueden mejorar las tasas de preñez, pero es importante encontrar un equilibrio. Si mejoramos mucho, en determinado tipo de predio puede ser antieconómico, por eso hay que buscar una tasa de preñez estable, pero que refleje la inversión del productor", explicó Díaz.

La buena noticia es que hay medidas para salir adelante, pero "si nos acordamos del entore un mes antes no vamos a tener ningún resultado", aclaró el experto. A nivel de vientres, medir la condición corporal de las vacas, asignándoles mejores pasturas o suplementación a las que lo precisen, es una buena alternativa y de hecho se aplica en varios predios.

Díaz también insistió en "separar las vaquillonas preñadas, desde que se confirma el tacto hasta el siguiente diagnóstico. Es la categoría complicada porque tiene que crecer, tiene que reproducirse y tiene que dar leche para criar a su hijo. Si logramos que esa categoría mejore el resultado será más visible".

A esa vaquillona, hay que aportarle un subproducto o fardos para que no pierda estado corporal, explicó el médico veterinario.

Otra medida de manejo que destacó es la clasificación de los toros por su capacidad de monta, por dominancia y por exámenes andrológicos. "El primer grupo, compuesto por esos toros que tienen la mejor capacidad de monta —además de mostrar un buen potencial de preñez y sanidad— son destinados a un determinado grupo de vacas con cría al pie", explicó. A su vez, el segundo grupo de toros, será usado en mayor porcentaje respecto a la cantidad de vientres porque los resultados van ser inferiores a los del primer grupo.

"No es lo mismo preñar un 75% de los vientres en el primer mes de los tres de entore que hacerlo en el segundo mes. Cuanto más concentrados estén los partos, mayor estabilidad le daremos a la cría", afirmó el director de Procreos SRL.

Clasificación.

Díaz también planteó entre otras medidas a aplicar la clasificación de las vacas por fecha de parto en tres lotes, porque son tres los meses de entore e igual lapso los de partos. "La que pare en el primer mes tiene muchas más posibilidades de quedar preñada que la del lote del medio. Las del segundo lote tienen mayores posibilidades respecto a las que conforman la cola de parición", dijo el profesional.

A su vez, el uso de marcadores previo al entore, medida que viene impulsando entre los establecimientos que asesora desde hace años, es otra gran salida y aporta certezas.

"En el momento de comenzar el entore se coloca un dispositivo en la vaca que permite medir cuando es montada porque cambia de color. A los 30 días de servicio se pasan por el tubo y hay un primer diagnóstico de situación de cómo va el entore", explicó. La que fue montada se destina a un potrero determinado, "sabemos que presenta celo regular pero no sabemos aún si está preñada. Van al mejor potrero o al mejor campo natural y con poca carga. Con eso y la selección de las vacas logramos un aumento de la ciclicidad (el celo tiene un ciclo en el vacuno de 21 días)", agregó Díaz.

Por otro lado, a las vacas que no presentan celo regular se les retira el ternero y se hace destete precoz. "Esos terneros se crían con sustituto lácteo, cuando tiene 40 o 45 días de vida, se le empieza a dar una ración especial que es muy cara y luego se sigue con la ración común. Eso hace que no se mueran los terneros, además de lograr preñar las vacas y concentrar los partos", explicó el profesional.

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La empresa Zambrano & Cía buscó aportar información a productores. Foto: A. Colmegna

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