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La demora en la entregas de su Model 3 provocó una pérdida de confianza en la firma automovilística
Aunque la demanda por los automóviles eléctricos de Tesla no para de aumentar, los analistas de los principales bancos de Wall Street no son igual de optimistas respecto de la compañía dirigida por Elon Musk.
Tras solo entregar 220 de los 1.500 Model 3 que tenía presupuestado para el último trimestre, tanto Goldman Sachs como Bank of America Merrill Lynch reiteraron su poca confianza a la firma e incluso recomendaron vender las acciones del fabricante de automóviles eléctricos.
Mientras que David Tamberrino, de Goldman Sachs, dio un precio objetivo a los papeles de la firma de solo US$ 210, John Murphy de BofAML es aún más extremo, al asegurar que el precio objetivo sería solo de US$ 155, es decir, más de un 50% menos de lo que actualmente valen las acciones de la compañía, que el viernes cerraron en US$ 356.