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¿Cómo ahorrar y lograr una conducción más eficiente?

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Mantenimiento: el costo mensual aproximado para tener un vehículo actualmente en Uruguay es de $ 14.350, incluidos patente, seguro, combustible, garaje y dos lavados por mes. Foto: AFP

Finanzas de bolsillo

Expertos dicen qué hacer para economizar el uso y mantenimiento del coche.

Mantenimiento: el costo mensual aproximado para tener un vehículo actualmente en Uruguay es de $ 14.350, incluidos patente, seguro, combustible, garaje y dos lavados por mes. Foto: AFP
El costo mensual aproximado para tener un vehículo en Uruguay es de $ 14.350, incluidos patente, seguro, combustible, garaje y dos lavados por mes.
Foto: AFP

Hay tres gastos que quienes tienen un vehículo de combustión interna no podrán —por más que quieran— evitar: el consumo de combustible, el Seguro Obligatorio de Automotores (SOA) y el pago de la patente de rodados.

A estos costos fijos se les suelen sumar otros gastos variables como los services oficiales, el pago de un garaje, eventuales multas, repuestos, lavados y mantenimiento en general del coche.

Si se estima que un vehículo 0 kilómetro de US$ 20.000 paga $ 19.620 al año de patente y $ 18.161 de seguro contra todo riesgo, si además se calcula que consume unos $ 6.300 al mes de nafta (suponiendo que hace 1.250 kilómetros al mes en ciudad), y si a eso se le suman los services oficiales cada 10.000 kilómetros, dos lavados al mes y el pago de un garaje, en Uruguay, el costo mensual aproximado sería de $ 14.350.

Esas son las cifras a las que llegó un informe de Motorblog que la Asociación del Comercio Automotor (ACAU) incluyó en su Anuario 2017, que revela el costo aproximado de mantener un auto en Uruguay.

Según dijo a El País el director de Autodata, Jorge Martínez De Boni, hay factores que no son tenidos en cuenta cuando se va a efectuar la compra de un vehículo, lo que luego ocasiona un mayor gasto del que se tenía previsto.

Según Martínez, lo que no se puede evitar es el costo del combustible. Consideró que en Uruguay casi no hay diferencia entre un auto que consume mucho y uno de mejor rendimiento. "Si se estima un uso promedio de entre 10.000 o 15.000 kilómetros por año, la diferencia en dinero es poco significativa en rangos generales", explicó.

Donde sí se puede evaluar un ahorro —según el director— es en el mantenimiento del vehículo y en las garantías. Estas pueden tener una duración de entre uno a cinco años, dependiendo de la marca y el modelo.

Para el empresario de Autodata la garantía es un aspecto clave, ya que si bien otorga respaldo, también obliga al comprador a realizar el service en los talleres oficiales de la marca para no perder la garantía.

Respecto al seguro, Martínez evaluó la posibilidad de disminuir costos al aprovechar convenios con algunas compañías o promociones especiales.

Asimismo, dijo que otra opción es bajar la calidad o el tipo de cobertura, aunque sugirió que en el caso de tener un siniestro, sería una decisión riesgosa.

Lo que más incide en el costo de los automóviles en Uruguay son los impuestos, así lo señaló a El País el gerente de ACAU, Ignacio Paz.

"El impuesto madre es el Impuesto Específico Interno (Imesi), el cual está racionalizado desde hace ya algunos años de acuerdo a la cilindrada del vehículo: a menor cilindrada menor Imesi. Hay cinco categorías, de entre 23% y 46%", dijo.

En 2017, la recaudación de la Dirección General Impositiva (DGI) por concepto de Imesi fue de $ 4.511 millones.

Asimismo, el gerente de ACAU enfatizó en la importancia de evaluar los costos de los servicios, "cuanto más calidad tenga el vehículo, menos dinero y tiempo gastará en el taller", señaló.

Por otro lado, el Automóvil Club del Uruguay (ACU), junto a la Federación Internacional del Automóvil (FIA) dialogaron con El País y brindaron sus consejos para lograr una conducción más eficiente.

Planificar bien el viaje antes de conducir es una de sus sugerencias. "Hay que tener en cuenta que diez minutos de conducción innecesaria en un viaje de una hora, provocan que el rendimiento del combustible se reduzca en un 14%", explicó desde ACU María Eugenia Longo.

Para desplazamientos cortos, es preferible realizar el trayecto en transporte público, a pie o en bicicleta. Además, otra opción para quienes van a realizar trayectos largos y quieran ahorrar es recomendable el carpooling (viaje compartido).

Comprobar de manera frecuente la presión de los neumáticos es clave para una mejor eficiencia en el uso del vehículo, ya que un neumático con la presión adecuada reduce la resistencia a la rodadura, lo que implica un aumento en el rendimiento del auto.

"Conducir usando neumáticos con una presión siete libras menos a la indicada en el manual del vehículo reduce el rendimiento del combustible en un 2% y en un 4%, respectivamente, en áreas urbanas y suburbanas", explicó Longo.

El peso adicional, así como la resistencia al aire también incrementan el consumo de combustible.

Una sugerencia es comprobar si el baúl lleva objetos innecesarios porque conducir con 100 kilos de peso extra ocasiona una reducción del rendimiento del combustible de aproximadamente el 6% en un vehículo mediano. Otro aspecto a tener en cuenta es que los vehículos modernos ya no precisan calentar el motor antes de empezar a conducir —excepto en condiciones de frío extremo.

Sí es importante mantener una conducción lenta después de poner en marcha el motor ya que ocasiona una mejora en el rendimiento del combustible.

El uso del aire acondicionado también es clave y desde ACU y FIA recomiendan usarlo únicamente cuando sea necesario: "El uso del aire a una temperatura excesivamente baja o alta no es deseable ya que usa gran cantidad de energía. Cuando la temperatura exterior es de 25°, el aire reduce el rendimiento del combustible en un 12%".

Si bien en un área urbana abrir las ventanas es más eficiente que usar el aire, cuando se conduce en ruta a mayor velocidad abrir la ventana es contraproducente debido a la resistencia del aire.

Otros consejos a seguir si se quiere lograr mayor rendimiento y evitar gastos innecesarios son: acelerar suavemente, mantener una velocidad constante, manejar a distancia con el vehículo de adelante para evitar aceleraciones o desaceleraciones (conllevan una reducción del rendimiento del combustible de entre 2% y 6%).

Además, aprovechar las pendientes y los descensos, usar la caja de velocidades para desacelerar (el uso del frenado del motor ahorra combustible y reduce el desgaste de frenos y neumáticos).

Por último, también ayuda no mantener el motor inactivo ya que utiliza combustible incluso cuando no está en movimiento. El caso que ejemplifica esto es que al mantenerlo inactivo por más de un minuto, se usa más combustible del que se necesita para volver a arrancar el motor.

El futuro es eléctrico: otro modo de ahorro

Las energías autosustentables han tomado un rol protagónico en el mundo y en Uruguay también. Tener un auto eléctrico (en algunos casos híbridos) implica un importante ahorro ya que están exentos del pago de la Tasa Global Arancelaria de 23%, solo pagan un 5% por concepto de Imesi (los vehículos a nafta pagan desde 23% a 46%), están exonerados también del pago de patente hasta 2022. Además gastan aproximadamente un 80% menos que un auto a combustible. A nivel de mantenimiento también es más barato el auto eléctrico ya que no requiere de tantas piezas como el auto a nafta. El motor eléctrico no se abre casi nunca, no lleva aceite ni bujías, ni caja de cambio. A diferencia del motor a combustión, el eléctrico tiene la ventaja de realizar el service cada 20.000 kilómetros y no cada 10.000 como el auto a nafta. En Uruguay, se estima que hay aproximadamente 160 autos enchufables, entre los que se encuentran taxis, ómnibus de Cutcsa y la flota de UTE. En marzo de 2017, UTE inauguró el primer tramo de la ruta eléctrica, tiene diez puntos de carga de potencia variada entre 22 kW y 44 kW. Cubre el corredor que une el departamento de Colonia con Chuy.

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