El saldo de balanza comercial fue deficitario en US$ 522 millones en los primeros cinco meses del año, bastante por debajo de lo evidenciado en igual lapso de 2014, cuando había alcanzado los US$ 996 millones.

Esta mejora en el resultado se dio ante una caída en las importaciones de 16,4%, con lo que en los cinco meses las compras del exterior cayeron hasta US$ 3.848 millones. Por su parte, las exportaciones también retrocedieron, aunque la baja fue menor al movimiento que evidenciaron las compras, al disminuir 7,8% en la comparación, hasta los US$ 3.325 millones.

El principal efecto de la baja en las exportaciones en ese período, llegó por la caída en las ventas de productos alimenticios, y en particular de productos lácteos, explicado por el cierre de la planta de Ecolat en febrero. Le siguieron las menores ventas de productos provenientes de la refinería de petróleo.

Por su parte, en los 12 meses a mayo, el déficit comercial se redujo hasta US$ 1.132 millones, ante una caída en las exportaciones que también fue menor a la baja en las compras externas. En ese lapso, las ventas al exterior totalizaron los US$ 8.873 millones, en tanto las importaciones alcanzaron los US$ 10.006 en los 12 meses.

Importaciones y exportaciones