Ayer el dólar volvió a subir, pero mínimamente y sigue "planchado" en niveles cercanos a los $ 28. Eso hace que Uruguay tenga una situación de competitividad "bastante comprometida", afirmó ayer la gerente senior de Asesoramiento Financiero de Deloitte, Tamara Schandy.

Graficó que el tipo de cambio real respecto a Brasil está "28% abajo del promedio de los últimos 40 años" y no está lejos de los niveles de 1999-2002 cuando el vecino devaluó y Uruguay no lo siguió. Además, está "30% abajo del promedio de los últimos 40 años con Estados Unidos", apuntó.

Para Deloitte, el dólar terminará el año a $ 30 y 2017 a $ 34. "Uruguay no puede seguir encareciéndose en dólares. La inflación ha ido bajando y debería dejar cierto lugar para una política monetaria menos contractiva en los próximos meses", afirmó Schandy.

Ayer, la moneda estadounidense se negoció al alza por segunda jornada consecutiva. El dólar interbancario fondo se operó a $ 28,044 en promedio, lo que implicó un alza diaria de 0,08%. De esta manera, la divisa acumula una caída de 1,18% en el mes y de 6,12% en el año.

En tanto, el Banco República aumentó cinco centésimos la compra de la cotización al público a $ 27,72 y mantuvo inalterada la venta en $ 28,37.

A través de las pantallas de la Bolsa Electrónica de Valores (Bevsa) se negociaron US$ 53,4 millones. Agentes cambiarios dijeron a El País que el mercado de ayer contó con la participación del Banco Central al inicio de la jornada, que compró dólares en $ 28,05 y $ 28,10, pero solamente por US$ 4,2 millones. Luego se ausentó y no intervino más en toda la jornada.

Esto generó que apareciera la misma fuerte presión vendedora de los días previos, y la divisa comenzó a bajar, hasta tocar el mínimo del día de $ 28,03, y se mantuvo en esos guarismos el resto de la sesión.

Las fuentes consultadas agregaron que el fuerte volumen de compras fue realizado, en su mayoría, por un banco privado y el BROU.

En el caso de la institución financiera privada, estimaron que se trataron de negocios puntuales.

Los agentes destacaron que, ante el mínimo aumento del rango de precios dentro del cual se movió el dólar, algunos aprovecharon para realizar operaciones de "trading", vendiendo cuando estuvo más arriba y comprando en niveles más bajos.

COMPETITIVIDAD