Tasa de corte de LRM en pesos a 31 días fue la más baja en un año.

En una jornada sumamente tranquila y con escasos negocios, el tipo de cambio inició ayer la semana con una mínima caída de 0,08%, levemente presionado por una búsqueda de pesos más que nada a nivel minorista.

El promedio de las compraventas interbancarias de la víspera se realizaron a $ 31,282, nivel que se encuentra un 0,75% por debajo del cierre de abril y un 4,72% superior a la última sesión del año pasado.

Por su parte, el Banco República (BROU) mantuvo inalterada la cotización al público en $ 30,70 la punta compradora y $ 31,80 la punta vendedora.

A través de las pantallas de la Bolsa Electrónica de Valores (Bevsa) se concretaron solamente 37 compraventas por un total de US$ 14,1 millones.

Según explicaron a El País los operadores cambiarios consultados, la sesión de ayer se presentó muy calma. Destacaron que la menor volatilidad redujo la posibilidad de concretar negocios.

De hecho, la cotización máxima alcanzada fue de $ 31,36, al tiempo que la más baja fue de $ 31,23, finalizando en el mismo nivel del cierre del viernes: $ 31,25.

Las fuentes destacaron que, dentro de la tranquilidad del circuito, la presión vendedora que propició el leve descenso del dólar fue la búsqueda de pesos a nivel minorista o de cambios.

De esta manera, el mercado local se desprendió de la tendencia alcista registrada en el exterior, principalmente en Brasil, donde dio un salto de 1,82% al finalizar el día en niveles de R$ 3,5823.

Por otra parte, el Banco Central (BCU) emitió ayer Letras de Regulación Monetaria (LRM) en moneda nacional a 31 días de plazo, cortando en 11,5%. Este guarismo es el más bajo, para un plazo similar, desde principios de junio del año pasado.

De los $ 500 millones anunciados, el BCU terminó aceptando $ 569,52 millones, por los que recibió una demanda por casi $ 1.600 millones.

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