La posibilidad de que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) eleve las tasas de interés en junio sigue siendo "fuerte", aseguró un alto funcionario del organismo, considerando temporal el impacto de la firmeza del dólar y de la debilidad del petróleo.

El presidente de la Fed de Richmond, Jeffrey Lacker, que ha llamado por mucho tiempo a un rápido endurecimiento de la política monetaria, reiteró su perspectiva de que el gasto del consumidor, el mercado laboral y otras condiciones económicas han mejorado significativamente en el último año.

"A menos que los próximos reportes económicos discrepen sustancialmente de las proyecciones, la posibilidad de un alza en las tasas de interés seguirá siendo fuerte en la reunión de junio", dijo Lacker durante una presentación en el Global Interdepedence Center.

Las declaraciones de Lacker fueron una reiteración de las perspectivas pronunciadas en un discurso ofrecido del 31 de marzo pasado.

En su reunión de marzo las autoridades de la Reserva Federal reconocieron los riesgos externos y un débil inicio de año, pero se mantuvieron lo suficientemente confiados en la fortaleza de la recuperación para continuar sentando las bases para un alza de tasas de interés más adelante en el año.

Incluso los funcionarios que se sentían menos seguros con un alza de tasas a mitad de año estimaron que la economía ha mejorado lo suficiente como para que la Fed cambie hacia una evaluación reunión por reunión sobre si las tasas debiesen aumentar.

En tanto, pronósticos técnicos proyectaron que aunque el crecimiento económico de Estados Unidos se ha desacelerado, se mantendría lo suficientemente sólido como para seguir progresando hacia las metas de inflación y desempleo de la Fed, particularmente después de que el impacto de un aumento del dólar y una caída de los precios del petróleo comiencen a ceder.

Alto funcionario cree que las condiciones “han mejorado”