Decisión
La ministra de Industria, Energía y Minería, Carolina Cosse dijo que en lo que resta del año, se mantendrán las tarifas de los combustibles pese a la suba del precio del petróleo.
"Viendo la integralidad y considerando que Ancap tiene elementos razonables para cerrar con buena salud financiera el año, se definió no tocar el precio de los combustibles" hasta 2019, informó ayer la ministra de Industria, Carolina Cosse.
El anuncio, realizado al ser consultada por la prensa al respecto, llega luego que la semana pasada la jerarca manifestara que la suba del dólar y del precio del barril de petróleo "presionan" a Ancap para analizar una suba de los combustibles.
"Hace varios días venimos atendiendo el tema, analizando todos los aspectos. Se tuvo en cuenta la integralidad de la situación del país, la salud económica de Ancap —se analizó que sin aumentar los combustibles mantenía un margen (de ganancia) antes de impuesto positivo— y por otro lado que una variación en el precio de los combustibles podría afectar a importantes sectores de la producción", explicó Cosse.
Mencionó que "estamos en el momento de siembra de varios productos y de cosecha de la siembra de invierno", sumado a que "afectaría al transporte" un aumento del precio de las naftas y el gasoil.
La decisión tomada por el gobierno hará que Ancap "quizás no termine ganando los US$ 40 millones a fin de año" que se fijó como meta, pero Cosse subrayó que igualmente "mantiene indicadores de salud financiera razonables".
Acerca de la paramétrica que toma la petrolera como referencia para los combustibles, Cosse repasó que el valor promedio del dólar está casi alineado —Ancap tiene previsto $ 30,50 y el promedio del año es $ 30,43— mientras que el barril de crudo está debajo —el valor promedio del año es US$ 73,5 y Ancap lo previó a US$ 75.
"Estamos en una zona como para prestar atención, pero se evaluó que no es necesario alterar el precio de los combustibles", concluyó la jerarca.
Por otra parte, la ministra comunicó que se mantendrán los beneficios en la tarifa de UTE para el sector lácteo, los arroceros, las industrias electrointensivas y las exportadoras.