El pedido de ajuste en los precios de los combustibles que este semana enviará Ancap al Poder ejecutivo incluirá la solicitud de que se apliquen subas diferenciales. Según supo El País, el criterio utilizado por el ente en esta ocasión será que el ajuste sea por un porcentaje menor para el gasoil y algo más alto para las naftas.

Ese fue el criterio que se puso en práctica en enero pasado cuando el ente aplicó una rebaja de 5,5% para el gasoil con el objetivo de favorecer a distintos sectores de la producción y de 3% para las gasolinas. Los porcentajes de corrección serán propuestos en las próximas horas a los ministerios de Industria y de Economía y Finanzas, que serán luego los que tendrán la última palabra.

Aunque el precio del barril de crudo Brent viene en descenso desde hace varios días (cerró en la víspera en US$ 58,51) y se ubica por debajo de US$ 60, el análisis que realiza la empresa para pedir la corrección toma como base la evolución que tuvieron el precio del petróleo y el tipo de cambio en el período abril-junio.

En esas fechas el promedio del dólar ($ 26,573) y del petróleo (US$ 63,57) determinó que el barril de crudo tuviera un costo para Ancap de $ 1.689,2, es decir un 15,8% por encima de la paramétrica vigente. Hoy las referencias son un barril de barril de petróleo Brent a US$ 60 y un dólar a $ 24,30, por lo que el costo contemplado por barril es de $ 1.458. El director de Ancap, Juan Gómez había dicho al El País que el pedido de ajuste responde a la necesidad de mantener la paramétrica alineada con la realidad.

Ancap define suba