Hace 27 años fuimos testigos del enlace por primera vez en la historia del flamante puerto boliviano Central Aguirre, en el canal Tamengo, con el puerto de Nueva Palmira. En efecto, el 15 de enero de 1990 llego a la terminal palmirense un tren de barcazas con soja boliviana en tránsito para el exterior. Tal suceso de enorme trascendencia política y económica, fue celebrado por autoridades uruguayas y bolivianas pues quedaba confirmada la salida de Bolivia al Atlántico a través del Acuerdo de Transporte Fluvial de la Hidrovía Paraguay-Paraná, documento firmado en 1989 como el Tratado de Santa Cruz, estampándose el cúmplase final el 26 de junio de 1992 en Las Leñas, Mendoza, Argentina. El 22 de enero de 1990 se celebró en Nueva Palmira el primer arribo de soja boliviana. La llegada de las barcazas con esa soja fue celebrada en Nueva Palmira donde quedó una placa recordatoria. Nosotros mucho antes habíamos estado en el puerto Central Aguirre donde presenciamos un acontecimiento comercial y político de enorme trascendencia para dos países, como fue la llegada a dicho puerto -ubicado en el canal Tamengo- de una embarcación paraguaya plenamente cargada con trigo por primera vez en medio siglo; temían allí lo peor, pero no pasó nada y todo se desarrolló dentro de la más absoluta normalidad. Creo que los dos países reanudaban relaciones, por lo pronto económicas.

Luego vinieron al amparo del tratado de la hidrovía los esfuerzos del empresariado y el gobierno boliviano por abrir a lo grande la salida de Bolivia al Atlántico.

La salida por el canal Tamengo desde territorio boliviano se hace al río Paraguay a la altura de Corumba con ciertas dificultades, debido a que en el cruce del canal y del río está la toma de agua potable de Corumba, que más que una toma de agua se parece a un puente en el medio del río y que por supuesto obstruye. Eso obliga a pasar las barcazas llenas con soja de a dos y rearmar el convoy frente a Corumba.

Desde entonces Bolivia está sacando su mineral de hierro desde El Mutum con dificultades ya que es desde un enorme yacimiento al borde de la hidrovía. Ahora bien, una mejor salida para esos minerales, e incluso para la soja, sería a través del llamado Puerto Busch, que con amplitud y sin restricciones está sobre el mismo río Paraguay y donde Bolivia tiene una costa soberana de 48 kilómetros.

PROYECTOS. De las minas abiertas de El Mutum hasta el llamado Puerto Busch hay unos 108 kilómetros de distancia, y son tierras tan bajas que llegan a la orilla como si fuera una playa. Para construir un puerto allí es necesario levantar el terreno unos tres o cuatro metros y como está situado sobre bañados también hay que levantar los ciento y pico de kilómetros si se quiere construir un ferrocarril o una carretera.

INDIOS. La primera etapa del desarrollo de esta industria fue la llegada de la empresa india Jindal que iba a invertir unos mil y pico de millones de dólares. El plan se cumplió en parte, pero dos o tres años más tarde gobierno y empresa no se entendieron y esta última se retiró del proyecto. Creemos que en este proyecto global Bolivia tenía que dar acceso al mineral por Puerto Busch para lo que se debían hacer obras de cierta magnitud. Más tarde el gobierno de Bolivia se hizo cargo del proyecto. Las últimas noticias que tenemos realmente nos sorprendieron pues en el llamado Puerto Busch se levantó, empleando madera y hierro, unas voluminosas instalaciones para cargar mineral y depositarlo en un tren completo de barcazas amarrado más abajo. La imagen muestra la impactante armazón del equipo cargador que sin duda debe llenar dos o tres barcazas al mismo tiempo. Suponemos que la carretera de unos 100 kilómetros que lleva al yacimiento, debe ser un camino confiable y seguro para los camiones. Creemos que esta imagen de Puerto Busch la publicamos nosotros por primera y segunda vez en exclusividad.

Los bolivianos están sacando mineral de hierro que por el momento queda en puertos argentinos para su consumo, y en cuyas acerías se procesa.

MINERAL DESDE BRASIL. Entre tanto está llegando a Corporacion Navíos en Nueva Palmira, como ya lo informáramos, manganeso y mineral de hierro, y que en un primer barco salieron alrededor de 40 mil toneladas para Rotterdam; nos dicen que se está preparando un segudo embarque para dentro de algunos días. Están llegando desde Corumba numerosas barcazas con dichos minerales. Las barcazas son de dos tipos: para 1.600 toneladas y otras para 2.500. El mineral se está acopiando en sus patios.

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