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Los factores que alientan al MEF a mejorar expectativas

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Astori: espera responsabilidad política en la discusión. Foto: Reuters
Uruguay's Economy Minister Danilo Astori gestures during a news conference to announce economic measures at the Uruguayan Presidential building in Montevideo, May 23, 2016. REUTERS/Andres Stapff URUGUAY-ECONOMY
ANDRES STAPFF/REUTERS

Qué elementos explican la corrección al alza que hará a sus proyecciones.

En el Ministerio de Economía (MEF) hay confianza en que las proyecciones de crecimiento de la actividad que había trazado en la última Rendición de Cuentas se quedarán cortas.

Los antecedentes más recientes muestran que, en efecto, el equipo económico proyectó por debajo de la expansión real que tuvo el Producto Interno Bruto (PIB). Mientras que para 2016 había anticipado un aumento del producto de apenas 0,5%, finalmente lo hizo a una tasa de 1,5%.

"La previsión del gobierno para el año 2016 ya fue totalmente superada por la realidad", dijo ayer en relación a este punto el titular del MEF, Danilo Astori, en el marco de una conferencia de prensa junto a la ministra de Turismo, Liliam Kechichian.

Las palabras de Astori llegaron un día después de que el Banco Mundial (BM) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) mejoraran al alza sus perspectivas de crecimiento para Uruguay. El Fondo publicó el martes su informe Perspectivas Económicas Mundiales, en el que apuntó que anticipa que la economía nacional crezca 1,6% este año. En diciembre el número manejado había sido 1,4%. Para 2018, en tanto, espera un aumento de 2,8% del PIB.

Según Astori, esto "confirma el hecho de que la economía uruguaya está recuperando los niveles de crecimiento mayores a los de 2015 y los del primer semestre de 2016". El jerarca fue un paso más allá con sus declaraciones: "teniendo en cuenta las cifras y la realidad uruguaya, me parece que vamos a estar por encima de la estimación del Fondo para 2017".

Si bien el secretario de Estado se excusó de brindar las cifras que están afinando en el edificio sobre la calle Colonia —se conocerán en la próxima Rendición de Cuentas—, sí dijo que se estará "un poquito por arriba de" las estimaciones del FMI. Semanas atrás, en una entrevista con Telebuendía de Canal 4, Astori había afirmado que el PIB aumentaría entre 2% y 3% en 2017.

Las estimaciones "modestas" para este año a las que se refirió Astori, contenidas en la Rendición de Cuentas del año pasado, marcaban que este año la economía crecería 1%.

Luces verdes.

¿Cuáles son los elementos que ahora llevan al MEF a hablar de una expansión que podría triplicar lo que había previsto en junio del año pasado? Son varios los factores que se alinearon para que el escenario económico luzca más alentador que un año atrás.

La región —socio comercial clave de Uruguay— parece en mejor forma que en 2016. Tanto Brasil como Argentina sufrieron caídas de la actividad el año pasado (3,6% y 2,3%, respectivamente), pero se espera que en 2017 las dos naciones fronterizas puedan cambiar la pisada: el FMI habla de un leve aumento de 0,2% para la primera, y uno más generoso (de 2,2%) para la segunda. Desde el barrio se esperan mejores noticias que en años pasados.

La trayectoria del dólar a nivel mundial tampoco ha provocado grandes dolores de cabeza para el equipo económico. En la primera mitad del año pasado los analistas aguardaban que la divisa estadounidense se disparara —algunos manejaban un tipo de cambio superior a $ 35 para el cierre de 2016—, pero este pronóstico finalmente no se cristalizó. El billete verde terminó el año en $ 29,3 y ayer cotizó a $ 28,40.

Esta moderación del dólar —que se empezó a observar en la segunda mitad del año pasado— repercutió, entre otros, en una mejora del consumo doméstico. Un tipo de cambio alto desalienta la compra de bienes y servicios (especialmente aquellos cuyos precios están marcados en dólares), mientras que el caso contrario, la fomenta. Para muestra basta un botón: en el primer trimestre de este año hubo un incremento de 25,1% en las ventas de vehículos frente a igual período de 2016.

La inflación —que se había convertido en un motivo de desvelo para el equipo económico— entró en los 12 meses a marzo en el rango meta fijado por el Banco Central (BCU) por primera vez desde fines de 2010 y llegó a 6,71%.

La zafra turística de verano —récord tanto en ingreso de visitantes como en gasto, según los datos divulgados por el Ministerio de Turismo— también empujó a que el comercio tuviera un buen arranque de año.

La actividad turística generó entre enero y marzo US$ 1.079 millones, 37,4% por encima del mismo período de 2017. La cantidad de personas que entró al país, en tanto, ascendió a 1.389.470, un aumento de 18,4% interanual. Ayer Astori dijo que se trata de un sector "fundamental" para el país, y agregó que "ya hace años viene siendo el principal rubro de exportación del país, por una distancia considerable además".

En tanto, el mercado laboral también mostró signos de recuperación en los últimos meses. Por ejemplo, el último dato disponible de desempleo lo situó en 8,1% en enero.

El campo, todo apunta, también traerá buenas nuevas. Ya se habla de una muy buena cosecha tanto de soja como de arroz, dos de los principales productos agropecuarios del país. Para el caso de la oleaginosa, días atrás Deloitte Objetiva sostuvo que la cosecha 2016/17 totalizará 3,2 millones de toneladas, por encima de los 2,4 millones de toneladas de la zafra anterior.

La soja ocupa un lugar relevante dentro de la canasta exportadora uruguaya: el año pasado fue el tercer rubro más colocado fuera de fronteras.

Renovación de beneficios.

En la conferencia de prensa que dieron ayer, Astori y Kechichian se refirieron a la renovación de los beneficios tributarios para los no residentes que lleguen a Uruguay. La ministra la describió como una "herramienta de competitividad que ha sido muy importante" para posicionar al destino. Astori, en tanto, dijo que por año implica una renuncia fiscal que asciende a unos US$ 20 millones. El decreto los extendió hasta octubre, momento en el cual se analizará su impacto para ver cómo proceder, indicaron los jerarcas. Asimismo, se anunció una línea de crédito por US$ 20 millones, otorgada por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que se destinará a "estimular el programa de corredores turísticos en la zona del río Uruguay", dijo Astori.

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Astori: espera responsabilidad política en la discusión. Foto: Reuters

CAMBIO EN LA PISADA

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