Por otro lado, prevé baja del peso que ayuda a “desinflación”

El banco brasileño Itaú prevé “una ligera depreciación en términos reales” del peso frente al dólar, lo que ayudará a que “el proceso de desinflación (se) reanude”, después que en enero se diera la mayor suba de precios desde septiembre de 2002 (+2,6%).

En un informe para clientes -al que accedió El País-, el banco señaló que el déficit fiscal de 4% del Producto Interno Bruto en 2016 “agregó un riesgo a la evolución de la deuda pública y las calificaciones crediticias”. De todas maneras, prevé que el ajuste fiscal en marcha logrará bajarlo este año a 3,3% del Producto, si bien “cumplir con el compromiso del gobierno de reducir el déficit al 2,5% en 2019 parece desafiante”.

Itaú marcó que en enero y principios de febrero, el peso uruguayo se apreció frente al dólar -o dicho de otra forma, el dólar bajó en Uruguay- en línea con otras monedas de América Latina. Eso llevó al banco a revisar a la baja su estimación del valor del dólar para fin de año de $ 33 a $ 31,50, lo que es “una ligera depreciación (del peso o suba del dólar) en términos reales”. Además, espera que “el real brasileño y el peso argentino se fortalezcan en términos reales”.

Recordó que los precios al consumidor “aumentaron un 2,6% interanual en enero (8,27% anual), reflejando principalmente la reversión de la reducción temporal de los precios de la electricidad, así como los ajustes en otras tarifas”.

“Mirando hacia el futuro, esperamos que el proceso de desinflación (se) reanude, ayudado por una menor depreciación nominal del peso y mayores tasas de interés”, añadió.

El Itaú redujo su previsión de inflación para 2017 a 8,5% (desde 8,9%).

Respecto a la actividad, el banco no modificó sus proyecciones y prevé que el PIB aumente 1,2% este año, después de que lo habría hecho un 1,4% en 2016 (los datos se conocerán el próximo 23 de marzo). A su vez, prevé un desempleo de 8% para el año.

Para el año próximo, el banco estima un crecimiento económico de 2% (“en línea con las mayores tasas de crecimiento previstas para Brasil y Argentina”, indicó), una inflación de 8% y un dólar al cerrar el año a $ 34.

BANCO BRASILEÑO