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La OPP saliente se defendió de las críticas del astorismo

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Gabriel Frugoni
CONF. DE PRENSA LUEGO DE CONSEJO DE MINISTROS, T. EJECUTIVA, PRESIDENCIA, FOTO FLORES, ND 20100322, Director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), Gabriel Frugoni - FRANCISCO FLORES/DIARIO EL PAIS
FRANCISCO FLORES/DIARIO EL PAIS

Unos días antes de dejar el gobierno, los máximos asesores del expresidente José Mujica en materia económica, dejaron sentada su discrepancia con los cuestionamientos del astorismo en el manejo de las empresas públicas.

Así, defendieron lo realizado en materia de inversiones por parte de entes y rechazaron que sean responsables del mayor déficit fiscal en 2014. Además propusieron algunos cambios para el gobierno que acaba de entrar en funciones (ver aparte).

En el documento "Desafíos Políticos de la Planificación. La OPP en 2010-2014", uno de los siete capítulos está dedicado a las empresas públicas. El informe contiene dos firmas en el prólogo: la del ahora exdirector de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), Gabriel Frugoni, y la del exsubdirector de OPP, Jerónimo Roca.

Ambos —junto al presidente de la Corporación Nacional para el Desarrollo, Pedro Buonomo— fueron los principales asesores en materia económica y tributaria, y muchas veces su visión (acerca de impuestos, de gasto, de inversión de empresas públicas) chocó con la de Fernando Lorenzo (cuando fue ministro de Economía) y Danilo Astori (exvicepresidente).

Con el cambio de mando, las señales que han dado Astori (que será ministro de Economía desde el miércoles) y sus allegados y el flamante director de la OPP, Álvaro García, van hacia un mayor control de la gestión y las inversiones en las empresas públicas.

García dijo en entrevista con El País en diciembre, que la "planificación y control" de las empresas públicas será una tarea "prioritaria" para su gestión. "Acá habrá una vuelta de tuerca. No es sólo el control presupuestal de las empresas, como hoy se realiza, sino ir más allá y establecer indicadores de control permanentes, colaborar con esas empresas para mejorar y analizar su gestión. He trabajado en esto en el mundo privado con profundidad y estoy seguro que la planificación y el control pueden ayudar a mejorar la eficiencia de nuestras empresas", afirmó.

Por su parte, el integrante del Frente Líber Seregni y hombre cercano a Astori, Esteban Valenti, escribió una crítica columna sobre las empresas públicas. "¿Instalar la fibra óptica a los niveles que lo hizo Antel y en el plazo que se realizó era la prioridad nacional? ¿Cuál es la estrategia y el plan de negocios para que esa masiva instalación de fibra óptica tenga retorno, en cualquier nivel, en conectividad, dinero, etc.? ¿Cuántos usuarios utilizan hoy ese servicio de acuerdo a sus prestaciones? ¿Cuáles son los objetivos de futuro?", escribió.

También responsabilizó a los entes de ser causantes del 55% del déficit fiscal en 2014, cuando llegó a 3,5% del PIB, el mayor valor desde 2002.

Defensa.

Bajo el subtítulo "¿Descontrol?", la OPP saliente analizó "si son correctas o no las afirmaciones que con frecuencia adjudican a las empresas públicas cierto descontrol y, en particular, las responsabilizan del deterioro del déficit fiscal" que pasó de 2,4% del PIB en 2013 a 3,5% del PIB en 2014.

Explicó que "el resultado primario de las empresas públicas en 2014 (1,6% del PIB) estuvo en el mismo nivel que el año anterior", que "las transferencias a Rentas Generales de las empresas públicas superavitarias en 2014 (0,35% del PIB) también estuvieron en el mismo nivel que el año anterior (0,34%)" y que "el nivel de las inversiones en 2014 (2% del PIB) estuvo por debajo del nivel de 2013 (2.2%)".

Por eso, en el informe se señaló que "no es de recibo el argumento de que el deterioro del déficit fiscal en 2014 respecto a 2013 es atribuible al comportamiento de las empresas públicas".

También compararon el resultado de las empresas públicas con el del período anterior (2005-2009).

"En este caso, y siempre en términos estrictamente fiscales, el período 2010-2015 es el de peor resultado, pero ello no habilita, desde nuestro punto de vista, a hablar de un descontrol de las empresas públicas. En efecto, el superávit primario es similar en ambos períodos: 1.7% en 2005-2009 versus 1.5% en 2010-2014. El aporte vía impuestos es superior en el quinquenio 2005-2009 (4.3% del PIB versus 3.4%) lo que se explica, entre otros factores, por un menor pago de IRAE en este último período debido, entre otros factores, al aumento de inversión promovida (exonerada). Por su parte, las transferencias a Rentas Generales también fueron mayores en el quinquenio 2005-2009: 0.5% del PIB versus 0.3%. Las inversiones fueron mayores en el quinquenio 2010-2014 (1.8% del PIB) que en el período 2005-2009 (1.4%)", indicó.

Luego, en el documento se hizo hincapié en la inversión de los entes en el período.

"Todas las inversiones fueron consensuadas al inicio del período de gobierno. Dicho de otro modo, si hubo desvíos fue en el ritmo de ejecución pero no en la elección de las mismas", se aseguró.

"No puede considerarse que las Empresas Públicas hayan estado significativamente desalineadas de la Agenda de Gobierno", se indicó en el reporte de la OPP saliente.

"Finalmente, utilizar la inversión pública como variable de ajuste fiscal ha sido el recurso fácil de las políticas procíclicas que siguió el país antes de 2005. No obstante, la contraparte de esta (mala) elección es un deterioro en la capacidad de productividad y competitividad del país", concluyeron los exjerarcas.

Las "satélites" a derecho público

La OPP en su balance 2010-2014 propuso que "todas estas empresas satélites" (utilizadas para proyectos o rubros específicos por las empresas públicas) "se integren a la lógica de sus empresas madre, es decir, al derecho público. Es la única forma de que se alineen al interés general". Se indicó que "si bien el instrumento busca agilidad en la gestión, debe consignarse que OPP no interviene en las decisiones de creación de las nuevas sociedades anónimas. El papel de OPP se limita a examinar los balances de estas empresas, pero no se realiza un seguimiento de sus gestiones. Aún más, un examen más detenido ha permitido constatar que no siempre las empresas (públicas) tienen mecanismos institucionalizados de seguimiento y control estas empresas".

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