COVID-19

Un grupo de directivos del Centro de Almaceneros Minoristas, Baristas, Autoservicistas y Afines del Uruguay (Cambadu), se reunió con el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, para solicitar nuevas medidas de apoyo al sector gastronómico, junto a la extensión de otras que están alcanzando su vencimiento.

El expresidente y actual asesor del consejo directivo de Cambadu, Daniel Fernández, en conversación con El País explicó que las medidas solicitadas son para tener “algunas alas” para cuando comience la recuperación del sector, “sino se va a hacer muy cuesta arriba”, debido a “la crisis en la que está” el rubro gastronómico.

Dentro de las peticiones que le hicieron al secretario de Presidencia, está el aumento de la reducción de IVA, planteando que de los 9 puntos actuales (para pagos con tarjeta), se pase a la totalidad del impuesto, es decir 22 puntos. A su vez, plantearon que esta medida esté vigente hasta que finalice la temporada turística, el 31 de marzo de 2022.

Por otro lado, según Fernández, solicitaron que el aforo y el distanciamiento entre mesas vuelvan a ser los “habituales”, es decir los que regían antes de la pandemia de COVID-19, a medida que el índice de Harvard continúe “bajando”.

Del mismo modo, solicitaron la extensión, hasta el 31 de diciembre, de exoneraciones y descuentos que vencen el 31 de julio, como el de aportes patronales, los mínimos mensuales del IRAE, anticipo al patrimonio, descuentos de UTE, OSE, MontevideoGas.

En esta línea, otra de las peticiones fue que el subsidio de desempleo especial se extienda hasta marzo de 2022. Mientras que, para cuando comience al reactivación del sector, solicitaron un incentivo para la contratación de nuevo personal.

“Hoy el tema que tenemos en la gastronomía es que la gente no entra a los comercios”, señaló Fernández, siendo la crisis económica, desempleo y “temores”, algunos de los motivos.

La reestructuración de la deuda, la línea de créditos SIGA, con 12 meses de gracia para las empresas que aún no han tomado crédito, y la extensión del horario de cierre, de 2 a 3 de la madrugada, fueron otras de las medidas conversadas con Delgado.

Sin embargo, Fernández afirmó que “a la gastronomía tradicional (restaurantes, bares, pizzerías, parrillas) no le cambia la extensión del horario si no logramos que el público vuelva a los comercios”.

Con la mejoría de la situación sanitaria y la extensión del horario que tuvo el sector, señaló que “mejoro un poquitíto” la situación de la gastronomía, en donde estarían entre un 35% y 40% de los niveles pre pandemia de COVID-19.