Seis ejecutivos de la multinacional UPM se reunieron ayer con el ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori, y el director de Planeamiento, Álvaro García, para echar a andar el proceso de negociación entre el gobierno y la empresa que anunció que estudia construir una tercera planta de celulosa en Uruguay.

La delegación empresarial estuvo encabezada por Jaako Sarantola, vicepresidente senior de desarrollo de negocios de UPM en Uruguay.

La inversión será la mayor de la historia de Uruguay porque la fábrica sería más grande que la que ya tiene en Fray Bentos. La empresa tiene previsto invertir US$ 4.000 millones y el Estado uruguayo aportará unos US$ 1.000 millones para diversas mejoras en la infraestructura ferrocarrilera, vial y portuaria que resultan necesarias.

La obra comenzaría en la segunda mitad de 2018. Está definido que estará en el centro del país pero no está resuelto aún el punto exacto y los departamentos de Tacuarembó, Durazno y Cerro Largo intentar atraer la inversión. La pasta de celulosa sería transportada por tren hasta el puerto de Montevideo para su embarque hacia los mercados asiáticos y europeos a los que se destinará. El presidente Tabaré Vázquez aseguró el decidido apoyo del gobierno al emprendimiento y señaló que "esto no tiene antecedentes y tiene un impacto muy positivo para el país, porque se van a generar unos 8.000 puestos de trabajo dignos".

Para adecuar la infraestructura se bituminizarán 224 kilómetros de rutas, se trabajará en las vías ferroviarias y se acondicionará el puerto de Montevideo. La fábrica se inauguraría en 2020.

EMPIEZAN LAS TRATATIVAS