Se están proyectando aguas arriba de la Hidrovía Paraguay-Paraná, en territorio boliviano, cuatro puertos pertenecientes a empresas en cuyas obras han invertido más de 30 millones de dólares, y que están ubicados en la zona del canal Tamengo, provincia de Germán Busch, en Bolivia.

Una de las empresas privadas es Terminales Gravetal que se encuentra en las faldas de la laguna Cáceres en el municipio de Puerto Quijarro (Santa Cruz).

Otra de las empresas invirtió 10 millones de dólares para edificar una plataforma y dragar 3,6 kilómetros de longitud del canal Tamengo, con el propósito de uniformizar el calado en el agua a 2,5 metros.

Además de este puerto, ya está en trámite ambiental la ampliación de una plataforma, y, a largo plazo, prevén construir un puerto para dar servicios a otras firmas que opten salir por el Atlántico.

Gravetal está por concluir un puerto con una plataforma de 30 metros que reforzará sus dos muelles operativos para abrir sus servicios a otras compañías exportadoras.

En el canal también opera el puerto petrolero Free Port, dedicado principalmente a la importación de gasolina. Hasta julio, un 47% de las exportaciones de soja y sus derivados (214,7 millones) salió por los puertos de este canal. La carga se dirige principalmente a mercados de la Comunidad Andina de Naciones y de Europa. Algunas terminales del sur de la provincia de Santa Fe y puertos del Uruguay son clientes frecuentes de aquellas empresas bolivianas y sus productos.

De avanzar estas obras y otras en camino, es seguro que en algún momento se incrementará el comercio regional en los próximos años.

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