IMPUESTOS

La recaudación neta de la Dirección General Impositiva (DGI) -es decir, los ingresos una vez restadas las devoluciones de impuestos- creció 3,2% en julio frente a igual mes del año pasado en términos reales (descontada la inflación), luego de tres meses seguidos de caída.

La recaudación neta en julio alcanzó a $ 29.282 millones (US$ 840,9 millones).

Eso se dio por una fuerte baja (-13,4%) del monto de las devoluciones de impuestos, ya que la recaudación bruta se incrementó solo 0,6% en julio respecto a igual mes de 2018, según el informe divulgado ayer por la DGI.

Uno de los datos que permite evaluar el consumo es el de la recaudación del IVA -el principal tributo en términos de ingresos para el organismo-, que bajó 0,7% en el mes, si bien el IVA interno creció 1% (el que grava a las importaciones redujo 4,1% sus ingresos).

Los impuestos a la renta mostraron un aumento de 3,1% en la recaudación, con el IRPF como abanderado (+22,1%) y el IRAE -que grava a empresas- en baja (-10,8%).

En tanto, en enero-julio la recaudación neta de la DGI cae 2,2% en términos reales, frente al mismo período del año pasado. Los ingresos netos de DGI totalizaron $ 209.570 millones (US$ 6.168,8 millones) en siete meses.

En tanto, la recaudación bruta en ese lapso baja 0,7% en términos reales frente a enero-julio de 2018.

En lo que va del año los ingresos por IVA bajan 0,5% respecto a igual período del año pasado (con suba de 0,3% del IVA interno y caída de 2,3% del IVA importaciones). A su vez los ingresos por Imesi se redujeron 1,8% en el período.

Los tributos a la renta tuvieron una disminución de 1,4% en su recaudación. Esto se explicó por la caída en ingresos por el IRAE de 8%, que no pudo ser compensada por los aumentos en los ingresos por IRPF (+3,5%), Imeba (+5,2%) e IASS (+3,6%).

Por su parte, los impuestos que gravan la propiedad mostraron un crecimiento de 4,2% en la recaudación, con el Impuesto al Patrimonio con un aumento de 6,2% en los ingresos.