INN CONTENT PARA FUNDACIÓN ZONAMERICA

En marzo, cuando la pandemia del coronavirus llegó a Uruguay, los planes de todo el país debieron modificarse. Y fue la tecnología la que permitió que las actividades no se detuvieran. En cuestión de días se implementó el teletrabajo, mientras que el área educativa se mantuvo activa gracias a la puesta en práctica de las aulas virtuales.

Sin embargo, no toda la población uruguaya pudo acceder a las herramientas necesarias para esta nueva dinámica. Y es por eso que Fundación Zonamerica lanzó una campaña solidaria para despertar el espíritu cooperativo y de responsabilidad social que permitiera que los alumnos de los contextos más vulnerables de la zona metropolitana de Montevideo pudieran acceder a equipos que se ajusten a esta nueva forma de enseñanza.

En un trabajo conjunto con la Fundación Sophia —una red de centros educativos en contextos vulnerables y que llevan adelante una importante labor social—, Fundación Zonamerica logró reunir 470 equipos informáticos completos que, desde noviembre, fueron entregados a 12 instituciones educativas en zonas de contexto crítico. “Se quería generar un impacto inmediato y se logró una sinergia de clientes dentro del parque para un fin superior y solidario”, explica Mauricio Escobar, gerente de Desarrollo Organizacional de Zonamerica.

De esta manera, 16 empresas que forman parte de Zonamerica acudieron al llamado de la fundación y aportaron equipos en desuso, que fueron acondicionados para su utilización inmediata. A su vez, cada una de las computadoras fueron equipadas con cámaras web y adaptadores para conexión inalámbrica a Internet, y se instalaron sistemas operativos y programas que permiten que los alumnos puedan desarrollar múltiples tareas educativas.

“Se siente una satisfacción enorme el poder articular actores para generar una causa en común y llevarla a buen puerto”, asegura Escobar, quien comenta que más de 70 colaboradores voluntarios trabajaron durante tres meses para que cada alumno reciba su equipo en óptimas condiciones. “Se fomentó una comunidad de trabajo y entusiasmo para involucrarse por una buena causa y estamos muy agradecidos con todos los que pusieron horas de su tiempo para colaborar”, agrega el gerente de Desarrollo Organizacional de Zonamerica.

El proceso fue acompañado por las instituciones oficiales encargadas del contralor del Parque Zonamerica, como el Ministerio de Economía y Finanzas y la Dirección Nacional de Aduanas, que en conjunto con el Ministerio de Educación y Cultura se comprometieron con la iniciativa.

Escobar explica que para garantizar la trazabilidad y dar garantías, tanto a las empresas que apoyaron como a los organismos de contralor, todo el proceso fue certificado en cada una de sus etapas por un escribano público. A su vez, informó que se realizará un seguimiento responsable del impacto social del proyecto, que se desarrollará junto a la Fundación Sophia.

Además de los 470 equipos informáticos, Fundación Zonamerica también entregó más de 400 monitores y terminales de computadora para la implementación de salas de informática en instituciones educativas de contexto vulnerable.

A finales de octubre se realizó la presentación de los resultados de esta campaña solidaria y, en este contexto, el Arzobispo de Montevideo y presidente de la Fundación Sophia, Daniel Sturla, resaltó el trabajo de la Fundación Zonamerica e invitó a replicar gestos de este tipo. “Nos surge un enorme ‘gracias’ por la iniciativa”, afirmó.

“Es muy importante que tengamos conciencia de que con estos gestos estamos llegando al corazón de una situación que hace al presente y al futuro de nuestro país. En la medida en que cada uno desde su lugar, tratemos por todos los medios de poner la atención en las situaciones de fragmentación social que estamos viviendo, este tipo de gestos son fundamentales para imitar y replicar”, agregó Sturla.

Por su parte, el director ejecutivo de Fundación Sophia, Federico Reyes, agradeció la colaboración y destacó la importancia de este tipo de acciones. “Estamos muy agradecidos por esta colaboración, que significa mucho para nosotros, ya que en las escuelas de contextos más desfavorecidos en las que trabajamos no tienen la posibilidad de acceder a la infraestructura tecnológica que está disponible en la educación pública. Esta iniciativa apoya la continuidad del proceso educativo de muchos chicos”, comentó.

Si bien el disparador de la campaña solidaria fue la situación generada por la emergencia sanitaria, la iniciativa permitirá que todos los alumnos que recibieron sus equipos tengan acceso a todas las herramientas informáticas necesarias para su formación.

Se trata de una herramienta que ya se transformó en un insumo básico para el desarrollo pedagógico y que se volvió en un recurso esencial para construir el futuro de cada estudiante.