PRECIO ELEVADO

El nuevo iPhone X fue recibido ayer en Nueva York con las habituales muestras de entusiasmo cuando se venden por primera vez estos teléfonos, aunque también con cierto recelo por el elevado precio.

En la tienda de Apple de la estación de trenes de Grand Central, había desde primera hora filas de gente para comprarlo. Pero también se observaban personas con bolsas de Apple, algunas estrenando su nuevo teléfono para fotografiar la bóveda celeste que adorna el techo de la estación.

Dos clientes que compraron el iPhone dijeron haberlo hecho uno por una avería de un iPhone 7 y otro por un extravío, y decidieron comprar el nuevo modelo "porque se ve cool" y "suena cool", aunque para otros no fue suficiente.

"Por el precio (en torno a US$ 1.200) no lo compraría, es muy similar al 8, con la misma cámara pero más caro. Lo vimos y está padre, con la pantalla más grande, pero el precio es el motivo principal para no querer comprarlo", explicó uno de los clientes, Rodrigo.

Carlos y Karely Velázquez, mexicanos de vacaciones en Nueva York, se mostraron satisfechos con el aparato, que no creen que tiene un precio prohibitivo.

"A mí sí me pareció bonito, sí pensé en comprarlo, y comprándolo en EE.UU. es más atractivo", dijo Karely. "La verdad en el sentido del diseño sí es totalmente diferente. Lo externo, lo que ves es mucho más atractivo. Pero en lo interno es lo mismo", dijo Carlos.

Las acciones de Apple, la compañía que cotiza en Bolsa con mayor valor de mercado del mundo, subieron un 2,6% ayer porque los consumidores se agolparon en sus tiendas para comprar el último modelo del iPhone. EN BASE A EFE Y REUTERS