ENCUESTA

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“Después de registrar su peor recesión en la historia reciente este año debido al golpe del COVID-19, la economía de América Latina está lista para recuperarse en 2021 a medida que la demanda externa y la actividad interna revivan. Dicho esto, se avecinan riesgos importantes, sobre todo ingresos familiares moderados, preocupaciones sobre enormes brechas fiscales, incertidumbre con respecto a la trayectoria de la pandemia y agitación social”. Ese es el contexto que plantea la consultora FocusEconomics para la región.

La estimación promedio para América Latina en 2021 es de un crecimiento de 4,1% de la actividad (sin cambios respecto a la encuesta de octubre) según el informe que acompaña el sondeo que se realiza a bancos y consultoras. Para 2020 la caída prevista en la región es de 7,5%.
En el caso de Uruguay, los economistas y bancos revisaron al alza sus estimaciones del Producto Interno Bruto (PIB) para 2021, según la encuesta FocusEconomics Consensus Forecast LatinFocus de noviembre (a la que accedió El País).

“Las perspectivas económicas siguieron siendo sombrías en el tercer trimestre, después de la contracción récord del PIB del segundo trimestre por el impacto del coronavirus”, señaló la consultora sobre Uruguay.

“En cuanto al cuarto trimestre, debido a un aumento en los nuevos casos de COVID-19, el gobierno anunció a fines de octubre que mantendrá las fronteras cerradas al turismo durante los próximos meses de verano, lo que podría afectar la actividad”, agregó.

En el informe se señaló “después de la contracción proyectada de este año (-4,4% según el consenso de analistas) debido al impacto del COVID-19, la economía se recuperará en 2021. Se prevé que el gasto de los hogares y de capital se recuperará, mientras que las exportaciones deberían estar respaldadas por la recuperación de la demanda de socios comerciales clave. Sin embargo, una crisis sanitaria prolongada y una situación fiscal frágil, exacerbada por la pandemia, plantean riesgos”.

Los bancos y consultoras (son 21 los que responden este mes) estimaron en consenso que el PIB en Uruguay para 2021 crecerá 4,1% (hace un mes estimaban un aumento de 3,9%). Las respuestas varían entre 2,8% (FitchRatings y Barclays Capital) y 5,8% (Torino Capital).

La estimación del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) es de un alza de 4,3% en 2021.

El pronóstico de crecimiento de 4,1% de los analistas ubica a la uruguaya como la quinta economía que más crecería en 2021 en la región (detrás de la peruana con 9,3%, la chilena con 4,9%, la colombiana con 4,6%, la argentina con 4,5% y la boliviana con 4,4%). Venezuela (que no está incluido en el promedio regional) será el único cuyo PIB caerá: -1,9%.

Para 2022, los economistas y bancos estiman en consenso que la economía uruguaya crecería 2,6% (preveían 2,8% hace un mes), con respuestas entre 1,3% (Cinve) y 4,3% (Moody’s Analytics). El MEF prevé una expansión de 2,5% en 2022.

Los analistas prevén que el déficit fiscal en Uruguay mejore (respecto a 2020) en 2021 y 2022 tras el impacto del coronavirus que generó menor recaudación de impuestos, aportes, tasas y mayor gasto en salud y medidas paliativas por la crisis económica.

En los 12 meses cerrados a septiembre de este año (último dato disponible), el déficit sin el efecto “cincuentones” fue de 5,8% del PIB. El efecto “cincuentones” genera que aquellos que tienen en torno a esa edad y se salen del régimen de AFAP (una ley los habilitó) vuelquen lo acumulado en esas administradoras a un fideicomiso que administra el Banco de Previsión Social. Si bien eso es un ingreso para las arcas del Estado, en el largo plazo más que se revertirá, al ser mayor el gasto en pagar esas jubilaciones.

Para 2021 el consenso de los consultados (respondieron nueve) estimó que el rojo de las cuentas públicas (sin el efecto “cincuentones”) será de 4,3% del Producto, cuando hace un mes estimaban 4,1%. El mínimo previsto es de 2,7% (Moody’s Analytics) y el máximo es de 5,2% del PIB (Equipos Consultores). El MEF prevé un déficit de 3,8% del PIB en 2021 (tras un registro estimado de 6,6% del Producto proyectado en 2020).

Para 2022, en tanto, bancos, consultoras y AFAP proyectan un déficit fiscal de 3,1% del Producto -preveían 3,8% del PIB en octubre-, con respuestas entre 0,5% (Moody’s Analytics) y 4,7% del PIB (Fitch Ratings). El MEF estima que reducirá el déficit fiscal al 3,6% del PIB.

En noviembre, los 16 encuestados por LatinFocus (cinco no respondieron) redujeron las perspectivas de inflación para 2021. Los analistas estimaron en consenso que la suba de precios será de 7,3% (hace un mes preveían 7,5%). Las respuestas van entre 4,3% (Moody’s Analytics) y 9,1% (Oikos). La estimación del gobierno es de una inflación de 6,9%.

La meta del gobierno es de entre 3% y 7%. Solamente cuatro de los 16 analistas espera que se cumpla el objetivo del gobierno.

Para 2022 los analistas proyectaron en consenso una inflación de 7,1% (estimaban 7,3% en octubre), con previsiones entre 5,7% (Moody’s Analytics) y 8,2% (Oikos). El gobierno estima que será de 5,8% a fin de 2022.

Para ese año, la meta del gobierno es de entre 3% y 6%. De 11 analistas que respondieron en este segmento, solamente dos esperan que el gobierno cumpla la meta.

Por último, en noviembre los bancos, consultoras y AFAP mantuvieron sus estimaciones del precio del dólar para fin de 2021 y las redujeron para fin de 2022.

Al cierre de 2021, los encuestados por LatinFocus prevén en consenso que la moneda estadounidense cotice a $ 46,10 (mismo valor que en octubre). Las respuestas van de $ 44,30 (Instituto de Economía) a $ 47,60 (Barclays Capital).

Para fin de 2022, las consultoras, bancos y AFAP ven al dólar en $ 48,30 ($ 0,30 menos que en el mes anterior). El mínimo esperado es de $ 45,80 (Instituto de Economía) y el máximo es de $ 50,40 (BBVA).

“El peso debería perder más terreno en el futuro debido a la actividad económica moderada y la inflación elevada”, analizó FocusEconomics.