Habilitación de Brasil para EE.UU. sacará carne de otros nichos.
El gerente de Conocimiento del Instituto Nacional de Carnes (INAC), Pablo Caputti, estimó que la apertura de Estados Unidos para el ingreso de carne vacuna brasileña —desosada y madurada— es una ventaja para ese país, pero es necesario analizar cuál es su capacidad genuina, porque la carne que va para un mercado no va para el otro. Explicó que si bien, en los últimos meses de 2015 y en el primer semestre de este año, Brasil ejerció una presión de precios en el mercado chino, eso va a cambiar con esta apertura, porque lo que quiera colocar en Estados Unidos lo va a tener que dejar de exportar a China, por ejemplo.
Caputti afirmó que Uruguay también hizo algo similar en su momento. "Hubo un tiempo que estuvimos ingresando fuerte a Estados Unidos, después Rusia fue más atractivo y comenzamos a colocar en ese mercado y luego pasó lo mismo con China", recordó.
Además, agregó que este acuerdo sí le va a permitir a Brasil "construir un portafolio más diversificado de mercados" como tiene actualmente Uruguay. El funcionario del INAC informó que Brasil, actualmente, no tiene el acceso a mercados que posee Uruguay, pero "tenemos que seguir trabajando en una forma de defendernos y esa manera es agregándole más valor al producto, diferenciándose, segmentando y buscando nichos", porque en volúmenes "no podemos competir; hay otros atributos en juego".
Durante el primer semestre del año el mercado chino marcó una fuerte presión a la baja en los precios de la carne, primero por el mayor ingreso de productos brasileños a valores más competitivos y segundo, por los stocks disponibles del país asiático. Caputti comentó que desde INAC se creía que esa coyuntura se iba a ir absorbiendo rápidamente porque estos hechos ocurren por única vez, ya que no son una ventaja estructural.
URUGUAY BUSCA DIFERENCIARSE