La lucha biológica tiene muchos beneficios. “Es posible demostrar que la utilización de esta avispa contra las plagas de la soja al comienzo del cultivo, provoca que tengamos una población más grande de enemigos naturales de la chinche, por lo que se bajaría la población”, sostuvo el doctor César Basso, profesor titular de Entomología de Facultad de Agronomía, que tiene, además, una especialización en Francia.

Si bien la experiencia que se está desarrollando va dirigida a la lagarta de la soja, “pensamos que también tendrá consecuencia en el control de la chinche, porque no afectará sus enemigos naturales. El problema de la chinche de la soja es muy importante, viene después de la lagarta”, agregó.

En Francia se trabaja con estas avispas para controlar el pulgón del maíz. Evita tratamientos químicos que también afectan a los enemigos naturales del pulgón. También es interesante usar la avispa porque es posible utilizarla en distintas zonas, cerca de ríos, habitaciones y zonas refugio, no hay contaminación. Basso recordó que el control biológico “quito mucho volumen de químicos al cultivo, evitando la contaminación de zonas refugio y de fuentes de agua”.

La buena noticia, es que, según están viendo los investigadores, el costo de esta tecnología no será muy superior a los tratamientos convencionales, pero aportaría enormes beneficios al medio ambiente.

las “Claves” y beneficiosPablo Antúnez