La mejora en los valores del petróleo tonificó al mercado agrícola porque el crudo "es un barómetro de la demanda de materias primas", comentó Bill Nelson, chez Doane Advisory Services Dewey Strickler de la firma Ag Watch Market Advisors.

El operador dijo que por ahora los mercados agrícolas permanecerán relativamente calmados y deben mantenerse así hasta que el 31 de marzo, cuando la Secretaria de Agricultura de Estados Unidos publique su informe sobre las intenciones de siembra.

"Por ahora los expertos esperan un pequeño aumento de la superficie cultivada en maíz y soja esta primavera (boreal), aunque esto podía cambiar, pues ni el maíz ni el trigo pueden ofrecer mejores rentabilidades", señala Strickler.

Los precios de los granos han estado en los últimos días sometidos al vaivén de las informaciones sobre el clima en América del Sur, en momentos en que ha comenzado la recolección de la cosecha de soja, que por ahora marcha a un ritmo más lento de lo previsto. En Brasil "se estima que un 30% de la cosecha de soja está en mal o muy mal estado", recuerda Strickler, aunque agrega que las estimaciones siguen siendo de una cosecha récord.

En Argentina las dificultades para los agricultores no son menores. "Creíamos que en enero, Argentina iba a tener suficiente lluvia, pero las condiciones de humedad se han quedado por debajo, y las previsiones no anuncian sino precipitaciones muy pequeñas", señaló Bill Nelson de Doane Advisory Services.

Mientras tanto en Uruguay el clima también complica las sojas y se comienzan a jugar las pérdidas de rendimientos. Pero estos pésimos augurios en América del Sur han sido contrarrestados con la decisión de China de anular pedido por 395.000 toneladas.

China anuló oferta de 395 mil toneladas generando temor